Fotos para un fin de año apresurado 02
Destruír para edificar. Zaragoza está patas arriba. Además de las consabidas megaobras de la Expo 2008, las demás ambiciones arquitectónicas municipales como la desgraciada rehabilitación del antiguo Seminario o la reforma total de los transportes urbanos y la construcción de más grandes superficies innecesarias, el sector inmobiliario sigue con sus planes de transformar a esta ciudad en una Zaragotham hiperpoblada o que cada uno tengamos, por obra y gracia del milagro banquero, 6 ó 7 pisos.
Hace tiempo que desespero de lo que el capital quiere hacer de nosotros, o sea, que me limito a criticar y refunfuñar, mientras dejo que cada cual haga lo que crea/quiera/crea que quiere. Pero no paro de pensar si todos estos cambios son necesarios, si realmente vamos a tener una ciudad mejor o simplemente más nueva y sobre todo, quién se va a forrar con todo este despiporre y si quedará dinero en esta Neogoza para el 2009.
Esta foto de este triste paredón arbóreo es de al lado de mi casa. Llevan un año sacando tierra. Al menos 4 ó 5 pisos de subterráneo seguramente para tener más garages que vender. ¿Con semejante presupuesto no podían haberse llevado los árboles y plantarlos en otro lado? El terrorismo ecológico urbano es cada vez más feroz y menos controlado. ¡¡¡Construcción, al paredón!!!
Menos mal que en esta ciudad todavía siguen pasando cosas divertidas. Il Divo vinieron a tocar a nuestra ciudad inmortal. O al menos eso anunciaban los carteles que desde meses antes informaban del evento. Realmente no sé ni si llegaron a venir. No es que me interesen mucho, pero sí me chocó que los pegasen con tanta anticipación. Esta prisa provocó escenas curiosas como esta foto, donde el cutrerío hispano lucha por salir a flote. Artistas de revista versus glamour embotellado. No me hagáis elegir porque lo tengo muy claro.
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